Mil nubes que observar se atreven a nacer cada día en el cielo, millones de estrellas nos esperan para ser descubiertas, y cientos de pensamientos viajan por aquí, esperando que tú los leas y dejes tu huella en cada uno de ellos, siempre será bien recibida. Así que no esperes más, y entra en mi pequeña parte de cielo, que no tiene límites.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

El final deseado.

-Si te molesta, lo siento, pero si no tengo sentimientos para mi hoy, menos los tengo para ti.
Cuelga el teléfono y una sonrisa malvada es lo único que se atisba en su cara, ya era hora, y hoy no tiene un buen día como para seguir fingiendo.
Esta harta de todo, harta de estos jodidos días en los que nada sale bien, harta de que su familia le pregunte que tal ha ido el día, porque si les dice que mal le espera un sermón, harta de no poder gritar y correr para soltarlo todo, y harta de no haber un puto sitio en el que estar ella y sus pensamientos.
Desconecta el cable del teléfono, se acerca a los altavoces y les sube el volumen lo más alto que puede, ahora no tiene ganas de llorar, ese momento ha pasado, la música siempre le da esas fuerzas que necesita, aunque quizás hoy eso no era lo mejor.
Se tira al suelo, intentando que con el volumen de la música no tengan ni hueco sus pensamientos, necesita relajarse, pero un toque en la puerta de sus vecinos le hace despertar de nuevo, sabe que aquí nadie le dejara nunca estar sola cuando lo necesita y esa pena convertida en rabia extrema, ahora solo le permite abrir la puerta de cristal del balcón, y subirse a lo único que le separaba de acabar ya con todo, una última bocanada de este asqueroso aire es su ansioso y deseado adiós a todo, "ahí te quedas mundo, disfruta de lo poco que te queda".
Y ya no siente, ya no piensa, ya no volverá a ver ese mar infinito ni esos amaneceres color anaranjado, pero ya no importa, deseaba que todo acabara, y hoy parecía que todo estuviera en el lugar indicado para conseguirlo.



domingo, 16 de septiembre de 2012

Imposible.

Antes del verano pensaba que seria imposible olvidarte, aunque lo deseaba con todas mis fuerzas, deseaba levantarme y no alegrarme de venir al colegio sólo por verte, quería no buscar tu mirada a cada minuto que pasaba en la clase de historia, y anhelaba hablarte sin ponerme nerviosa y que no me empezara a temblar todo el cuerpo.
Pasados tres meses creo que te he olvidado,que he conseguido mi objetivo, o al menos ya no pensar en ti cada momento del día, no hacerte tres visitas diarias para saber a que hora te conectas, o no mirar tus fotos cada cinco minutos por si subías una nueva; puede que más bien lo creía, porque hoy has decidido saludarme de nuevo, escribir un hola en tu ordenador y pulsar la tecla enviar, y que tu palabra apareciera en mi pantalla como una novedad importante. Ahí me he dado cuenta de que no había sido yo la que te había saludado, que esta vez no había estado pendiente de cuando te conectabas para comenzar yo con mi holacaritasonriente, que había empezado a olvidarte, pero ya no quiero eso, me da igual que aparezcas cien veces cada día en mis pensamientos, de hecho lo echo de menos, necesito entrar a Facebook y buscarte, ver una película de amor y pensar que algún día la veremos juntos y abrazados, necesito que mi mente no te olvide, te necesito a ti.

No soporto la idea de que desaparezcas al fin para mi, porque te quiero a mi lado.



Pd: Sólo espero verte en el colegio y que una manada de mariposas aparezca en mi estómago y celebren una fiesta en tu honor, porque ya no puedo olvidarte, no quiero olvidarte.



lunes, 10 de septiembre de 2012

Deja de pensar y disfruta.

Quizás hoy no es el día, quizás ahora no es el momento, quizás aquí no es el lugar, o simplemente quizás debería dejarse llevar.
Levanta la mirada, y observa una fotografía tomada a los pájaros más coloridos que jamás había visto, volando  sin preocupaciones, después de haber recorrido miles de kilómetros huyendo del invierno, del frío, de la oscuridad. Se para a pensar dos segundos, y puede que al fin y al cabo ella no sea tan diferente de esos pájaros, cree que es una persona libre ya que tiene la mayoría de edad cumplida y su propia vivienda, pero en realidad se da cuenta de que siempre ha estado huyendo, de pequeña le aterraban los posibles monstruos que vivían en el fondo de su armario, hasta que descubrió que la verdadera maldad convive con ella fuera de las cuatro paredes de su habitación. Huye de un posible rechazo laboral, un despido o una simple bronca de su jefe.
Y huye de ese momento que está viviendo ahora, ese momento en el que sus ojos están clavados en los de él, en el que la mano de él comienza a recorrer cada parte de su cuerpo, y en el que sus labios se juntan deseando no separarse nunca. Ese momento que tanto había imaginado y en tantas películas había visto, ese momento que tantas dudas le causaba, había llegado, y es ahora, su cuerpo está en esa cama, pero su cabeza parece encontrarse a demasiados kilómetros como para darse cuenta de la situación.
Todos esos pensamientos recorren su mente en milésimas de segundo, y con un único objetivo, confundirla de lo que ella quiere, confundirla de sus opiniones, confundirla de... "te quiero", y todo se esfuma, es esa voz grave y perfecta que a él le caracteriza la que hace que su mente se quede en blanco, y por un instante no siente que deba seguir huyendo, por un instante decide dejarse llevar y responder esas palabras con un beso porque la voz no tiene fuerzas para salir,  por un instante disfruta del momento, y entre las sabanas se quedan esos miedos que siempre le habían perseguido junto con el aroma de la felicidad en cada caricia.
Quizás si era el momento, quizás ya estaba preparada para al fin volar del nido y dejarlo atrás.