Mil nubes que observar se atreven a nacer cada día en el cielo, millones de estrellas nos esperan para ser descubiertas, y cientos de pensamientos viajan por aquí, esperando que tú los leas y dejes tu huella en cada uno de ellos, siempre será bien recibida. Así que no esperes más, y entra en mi pequeña parte de cielo, que no tiene límites.

jueves, 4 de octubre de 2012

Ha llegado tu hora.

Desde su habitación puede notar como se tensa el ambiente y la tonalidad de sus voces aumenta. De nuevo él comienza a gritar a su esposa, sin motivo aparente, al parecer ya como costumbre casi diaria.
La niña, sabe lo que está pasando, lo ha vivido demasiadas veces, coge sus cascos, enciende su música y atrapada en su habitación intenta evadirse del problema, como su madre tantas veces le ha dicho. La niña, ha crecido entre esos gritos, no conoce otra forma de familia. A
pesar de que hoy cumpla los dieciséis, su corazón nunca ha contado todo lo que ha vivido, y tiene demasiadas preguntas sin respuesta y demasiado dolor acumulado.
Los gritos del hombre se elevan y elevan hasta la categoría de insulto, con la finalidad de dejar la mente de la mujer destrozada de nuevo. Pero hoy la música no consigue ahuyentar esas palabras llenas de superioridad, y a cada una que escucha su rabia va creciendo y creciendo. Siempre ha acabado como una discusión más, pero hoy parece que él se ha propuesto arrasar como un tornado sin dejar ningún motivo por el que su mujer pueda seguir sonriendo y, de repente lo hace, como un único aplauso suena, y un silencio solamente acompañado por un llanto  es lo que queda.
Era la gota que faltaba para que el vaso de la niña se derramara, tira sus cascos al suelo y con una fuerza de mujer sale de su habitación dispuesta a todo.
Encuentra a su querida madre tirada en el suelo, llorando, con la nariz sangrando, y en frente de ella, una silueta llena de orgullo con la mano levantada, la pequeña no piensa y se tira encima de él, no consigue mucho, tan sólo apartarlo, pero suficiente como para poder explicarle de un grito que no volverá a tocarla y que ni se le ocurra seguirlas, algo que debería haber hecho hace mucho tiempo. Ayuda a su madre a levantarse y juntas salen de casa, apoyándose la una en la otra, sin mirar atrás, confiando en que cualquier otro sitio será mejor que este.
Esa niña, que nunca había destacado por nada y se había limitado a esconderse de su propia realidad, hoy ha conseguido enfrentarse al mundo, y comenzar su vida, esa niña dejó de serlo hace mucho tiempo, y hoy ha conseguido demostrárselo al mundo y a ella misma. Hoy sabe de lo que es capaz y que nadie volverá a cambiar su sonrisa, que nadie volverá a decidir su futuro por ella, hoy sabe que ya es una mujer.




8 comentarios:

  1. Esa niña no volverá a tener que esconderse en sus cascos para hallar una vida sin problemas, la tendrá, por fin será una mujer valiente que sabe lo que se hace. Me ha encantado, esta entrada y tú sois perfectas. Te adoro princesa<3

    ResponderEliminar
  2. Oh, esta una entrada tan real... Me ha hecho sentir escalofrios y todo. La gente no se merece esconderse detrás de unos auriculares y sufrir en silencio. Esa chica ya podrá enfrentarse a la vida tal cual. Sin auriculares ni burbujas de por medio.

    (besos
    rellenos de
    felicidad)

    ResponderEliminar
  3. INCREÍBLE♥.

    Simplemente espero que si eso ha sucedido realmente sigas encontrando esa fuerza para ser tan valiente y fuerte. La vida es dura, pero tú lo eres más.

    ResponderEliminar
  4. Loooo sientoo, sé que hace mucha rabia (o decepciona) que te comenten sin leer tu entrada, pero es que ahora no puedo, no tengo tiempo arghhh D:
    Gracias, gracias y gracias por tu comentario ♥
    Bueno, a mi complicados ya no me los hace... pero le echo de menos. Y ayer en un ataque de euforia decidí que cuando vuelva a verle tengo que decirle algo, yo así es que ya no puedo, estoy super bien, llevo toda la semana motivada total, pero, LO QUIERO, y debo decírselo. Debo hacerlo, aunque el lunes le vea, intente acercarme a él y crea que me va a dar un ataque al corazón, sé que debo decirle algo. No sé el que, pero tengo que estar bien con él. Tengo que "arreglar" las cosas. Y no puedo esperar mucho, o no lo haré.
    ¡Y ya sabes que conmigo puedes compartir esto y lo que sea! <3 :)

    ResponderEliminar
  5. A veces, las persona débiles resultan ser las más fuertes.
    Bella entrada, princesa. Sigue demostrándole al mundo que cuenta contigo, que sin ti, no existe. (lo sé, digo cosas sin sentido)
    En serio, ha sido perfecta. Muchos besazos.

    ResponderEliminar
  6. Con decirte que me has hecho llorar creo que queda todo claro... Es desgarrador pensar que esto que describes en tu texto es una realidad que viven muchas mujeres y muchas niñas en este mundo, por ello tenemos que ser lo bastante fuertes como para valorarnos y para saber cuando tenemos que decir basta. Me ha parecido increíble, un beso <3
    http://palabrasolvidadaseneltiempo.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
  7. Creo que el maltrato, psíquico o físico, no es más que el recurso desesperado de un ser frustrado que necesita, a cualquier precio, dejar constancia de su “falsa superioridad”, moral o de cualquier otra categoría. Es por ello, pienso, que el maltratador maltrata a quien considera más inteligente o eficiente, a quien percibe como mejor persona. Porque cuando se mira en ella comienza a odiarse. Que la sociedad afirme que el machismo es un problema del pasado es, en mi opinión, el principal problema a que nos enfrentamos en el siglo XXI. Me alegra saber que mujeres como las protagonistas del relato han despertado... Gracias por tu texto, la chispa que ha provocado que comience a transformarse la energía!!!!!!!

    ResponderEliminar
  8. Menudo texto... Me ha dejado sin palabras.

    Esa niña que se refugiaba en sus cascos, ya no tendrá que volver a hacerlo. No al menos para refugiarse del exterior, de su propia realidad, de esos tormentosos momentos... Ella supo sacar la fuerza de donde ni siquiera creía tenerla, para mí eso merece mucho valor y valentía. Ahora ella debe de sentirse orgullosa, porque gracias a eso pudo acabar con toda esa tortura. Como tú bien has escrito, y algo que me ha encantado: "Hoy sabe de lo que es capaz y que nadie volverá a cambiar su sonrisa, que nadie volverá a decidir su futuro por ella, hoy sabe que ya es una mujer."

    Tus textos me han gustado; tu forma de escribir... Te sigo sin dudarlo. ¡Un beso!

    ResponderEliminar